Sacristía

La sacristía se ubicó en la planta baja de la torre, como era costumbre en el siglo XVI. La puerta de acceso a la sacristía está concebida a modo de arco de triunfo, es de estilo renacentista, y está decorada con una hornacina que alberga una Inmaculada Concepción acompañada por ángeles.

La sacristía está cubierta con una bóveda de casetones, realizada en el siglo XVI. La cajonería de madera de nogal fue tallada por Nicolás de Rueda y en ella aparecen la Virgen del Alcázar, primera patrona de Lorca, y San Patricio, titular del templo. Varios lienzos de diversos autores y épocas decoran la estancia: la Divina Pastora de las Almas, San Patricio, el Calvario, un Ecce Homo, San Sebastián, San José con el Niño y la Virgen del Rosario orlada de flores. Además, hay un Crucifijo del desaparecido retablo de la Virgen del Alcázar de 1642 y una Inmaculada del siglo XVII.

Bajo el suelo, hoy acristalado, encontramos las pinturas murales de la cripta de los canónigos de la Colegiata. La temática está relacionada con la muerte, y viene a significar “a nadie perdono”. Entre ellas destaca un árbol con coronas, yelmos y mitras.